Al campo se va ...

Circular Ubrique-Merga el Boliche-Sierra Baja-Aljibe-Ubrique Alto

Comenzamos a caminar desde el colegio Ramón Crossa de Ubrique. Sobre el Salto de la Mora (peña que se ve al fondo detrás de la población), está asentada la antigua ciudad prerromana y romana de Ocuri.



A la derecha del sendero queda la parte nueva de la población de Ubrique.


A la izquierda las vistas que se obtienen durante el recorrido son impresionantes debido a la majestuosidad de la sierra y su verticalidad.


Pared de roca caliza ubicada en el nacimiento del arroyo Garciago.


Fuente el Boliche.


Pila tallada en piedra caliza localizada junto a la misma fuente.


El camino discurre entre algarrobos, acebuches y lentiscos.


Se pueden observar numerosas aves, destacando las buitreras que se encuentran en los cortados rocosos.


Cochinilla del carmín, de la que se habla en el blog sangrando en verde.




Para que el ganado acceda a sierra Baja desde este lugar, han construido una rampa de madera, gavillas de hierro y malla metálica.


Evidentemente aprovechamos dicha estructura para seguir nuestro camino.



Paulatinamente la niebla se disipaba sobre las últimas estribaciones del Macizo de Líbar (pico de los Pinos).



El peñón del Berrueco se dejaba ver.


Una vez finalizada la subida por la Merga el Boliche. Continuamos por un sendero claramente marcado.


Curiosa formación rocosa que encontramos a nuestro paso, similar a un diván.


Encendimos una candela para comer algo, que apagamos debidamente al finalizar. 




En el centro un aljibe en sierra Baja. Detrás el Higuerón, el pico Adrión y el peñón de Zarco.



Bomba de agua ubicada en el exterior del aljibe. 


 Apreciamos el nivel del agua almacenada en su interior.




El pico del Gamón.




Continuamos el sendero pegados al crestón de roca caliza.


Poco a poco descendemos.



Hace unos años explicar lo que era un aljibe en alguna zona de la España seca era absolutamente innecesario. Hoy esta palabra de origen árabe (algúbb o al-yibab), despistaría a todos los jovenzuelos de las áreas urbanas. Hacer una casa sin aljibe en el campo era poco menos que imposible. Era la única forma de garantizar el suministro de agua.


Los aljibes son unos depósitos subterráneos que permiten almacenar las aguas de lluvia, recogidas sabiamente a través de canalizaciones, correntías, etc. Toda la sabiduría popular se acumulaba a la hora de construir el aljibe de la casa y poder acumular el agua potable necesaria para la familia y otros usos. En este caso apreciamos el depósito subterráneo, por delante del patio de recogidas, y las canalizaciones que conducen las aguas de lluvia desde el tejado a éste. El acceso al agua almacenada se encuentra al abrir la puerta. Si vertimos la misma desde el cubo por el canal que vemos en la pared en la parte izquierda, ésta llega a un pilón adjunto al aljibe que servía de abrevadero para los animales.

Los aljibes solían construirse con ladrillos unidos con argamasa. Para evitar las temidas infiltraciones y la putrefacción del agua que contenían, las paredes internas se recubrían con una mezcla de cal, arena, óxido de hierro, arcilla roja y resina de lentisco.


Llegamos a las proximidades del paso Indio.



Ubrique.


Ascención al Pico del Gamón

Ubrique, antes de ser conocida por la artesanía de la piel, era famosa por sus aguas y sus numerosas fuentes. La mayoría de ellas nacen en rocas calizas, filtrándose el agua por éstas para formar balsas acumuladas de agua bajo tierra. En invierno, con las fuertes lluvias, estos manantiales revientan, pudiendo abastecer al pueblo de agua. El agua de la fuente de los Nueve Caños procede del nacimiento del Benalfil. Esta fuente es de origen árabe. Se reestructuró en el siglo XVIII y se modernizó en 1940. Una característica muy curiosa es que mantiene una temperatura constante de 4º C. Aquí existía un lavadero público hasta hace poco. Este agua también era utilizada para curtir la piel con el fin de ablandarla y poder trabajarla. Para ello se utilizaba cal, agua y sal.
 
 
La cabeza del toro entre Benaocaz y Ubrique.
 
 
 
Un panel de la Junta de Andalucía explica lo que sigue:
"Nos encontramos en una zona de altas precipitaciones. Por ello los ingenieros romanos tuvieron que proyectar una serie de obras para evitar que las escorrentías fueran destruyendo los caminos. A ambos lados de la calzada vemos las cunetas, y de tramo en tramo los aliviaderos. Sin embargo, las obras más sobresalientes eran las alcantarillas. A través de las mismas, el agua de las cunetas era recogida y se pasaba al otro lado de la vía.
 
 
Para construir la alcantarilla, lo primero que se construía era una estructura de madera (la cimbra) sobre la que colocar las piedras talladas de forma de cuña (dovelas) y la piedra más alta que cerraba el arco y permitía la estabilidad, llamada clave. Una vez terminada la obra la cimbra era retirada."
 
 
A la altura de Archite nos dirigimos hacia Agua Nueva y sierra Baja. Atrás quedan Benaocaz, la sierra del Pinar y sierra Alta.
 
 
Ubrique, Mulera, Fátima, Cardela y la sierra de las Cabras.
 
 
El peñón del Berrueco y Gibraltar.
 
 
 
Hicimos una parada para tomar algunos alimentos y reponer energía.

 
Pasado este portillo nos desviamos a la derecha hacia la cima del Gamón.

 
 
Nos encontramos en el sendero una enorme encina caída desde la raíz.
 
 
Sierra del Pinar.
 
 
Sierra de las Nieves.

 
Sierra del Caíllo.

 
Sierra de los Pinos.

 

Estrecho de Gibraltar.

 
Cumbre del Gamón.
 
 

 
Fátima, Dehesa de la Silla y el Higuerón.

 
 
Pilón-aljibe.

 
 
Descendiendo hacia Ubrique.
 
 

Ubicacion